Los trabajos de restauración de las pinturas de la Ermita del Calvario de Bordón han finalizado esta semana. Gracias a la intervención del área de Patrimonio de la Comarca del Maestrazgo, se continúa así la apuesta por el mantenimiento de elementos patrimoniales del territorio.
En una nota de prensa, la entidad comarcal ha sostenido que las grisallas datan de finales del siglo XVI, principios del XVII, y muestran distintas escenas de la Pasión y Muerte de Cristo.
Según la interpretación de la técnica de Patrimonio de la Comarca del Maestrazgo, Sonia Sánchez, «creemos que había una escultura en bulto con Cristo en el sepulcro y, sobre ella, se encuentran las pinturas que se han conservado en la parte frontal de la cripta”.
La iconografía muestra las figuras de las tres Marías, la Virgen y San Juan, enmarcadas por dos personajes que sostienen el paño de cubrimiento. También se pueden apreciar escenas de la Oración en el Huerto de los Olivos y de la Flagelación de Cristo. Al otro lado de la cripta, las grisallas muestran la Última Cena y unos soldados de gran tamaño guardando la tumba.
La Fundación Santa María de Albarracín, encargada de su restauración, ha limpiado, fijado y reintegrado la policromía de las pinturas para frenar su degradación, a la vez que esta intervención ha permitido una mejor lectura de las escenas.
Tras esta actuación, el área de Patrimonio de la Comarca del Maestrazgo tiene previsto continuar trabajando en favor del patrimonio comarcal, planificando ya las próximas intervenciones que pondrán en valor distintos elementos patrimoniales en otros municipios de la zona.
