El grupo del PP en las Cortes de Aragón ha registrado una petición de comparecencia de la consejera de Sanidad del Gobierno autonómico, Sira Repollés, para que informe sobre el cierre, este verano, de la atención de las urgencias de varios centros de salud por las tardes, fines de semana y festivos.
La diputada portavoz de Sanidad del PP en el Parlamento, Ana Marín, ha manifestado en una nota de prensa que su partido respalda las reivindicaciones de los sindicatos sanitarios para que no se produzcan esos cierres.
«Hemos registrado la petición de comparecencia de la consejera para que dé explicaciones sobre este nuevo recorte de un servicio básico a los aragoneses», ha esgrimido Marín, para añadir: «Esto hay que pararlo».
La parlamentaria ha advertido de que esta medida se suma al cierre de varios consultorios médicos locales, a la falta de especialistas en determinados hospitales, como el Obispo Polanco en Teruel, o a las «excesivas demoras» que sufren los pacientes que esperan una intervención quirúrgica o una cita con un especialista.
La diputada del PP ha apuntado que el PSOE llegó al Gobierno de Aragón prometiendo a los aragoneses «que acabaría con la austeridad y que recuperaría la calidad de los servicios públicos, pero la realidad es que llevan seis años y no han solucionado ninguno de los problemas que existían».
Marín ha lamentado la «incapacidad» del Ejecutivo autonómico para ofrecer a los aragoneses una sanidad pública de calidad y ha calificado el recorte previsto por el Departamento de Sanidad como un «nuevo ataque a los profesionales sanitarios, a los que habría que cuidar especialmente después del grandísimo esfuerzo que han realizado y que siguen realizando para combatir la pandemia de la COVID-19; con esta medida la consejera perjudica a los pacientes y también a los profesionales».