Marcos Valle Aguado, propietario del establecimiento Zombies y Princesas, saca al mercado su primer juego, Isabel y Diego, una propuesta de estrategia donde los participantes retroceden hasta el siglo XIII para meterse en la piel de los amigos de una joven Isabel de Segura y su prometido Juan Diego de Marcilla.
Los jugadores, partidarios de la pareja, tratarán de ayudarles a cumplir su sueño de poder casarse y estar juntos para siempre, procurando que Diego logre obtener la fortuna necesaria para ser digno pretendiente de Isabel, a la que tampoco deben dejar ceder a las presiones externas que la empujan a desposarse con don Rodrigo de Azagra. Mientras, el resto de jugadores, partidarios de los Azagra, deberán obstaculizar la unión de los
Este proyecto, que nació hace casi seis años, no es obra de una sola persona. Cuenta con la colaboración de casi una veintena de artistas turolenses que han aportado sus ilustraciones para crear una obra tan heterogénea como atractiva, de gran belleza artística. Además, Isabel Cortel se ha encargado del contexto histórico y de nutrir al juego de una base sólida apoyada en los textos.
Isabel y Diego es un juego de estrategia, compuesto de tablero, cartas y miniaturas, con una preciosa presentación. Está pensado para 3 a 7 jugadores y con una duración media de una hora.