La Comisión de Salud Pública, en la que están representadas las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, ha avalado las dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 a todas las personas mayores de 18 años, por lo que se amplía el rango de edad, que se situaba por el momento hasta los 40 años.
De esta forma, una vez se termine con los adultos mayores de 40 años, se empezará con los de 30 y así sucesivamente hasta llegar a los de 18. En cualquier caso, se priorizará a las personas de riesgo y a las que completaron hace más tiempo la pauta de vacunación. Por otra parte, la Comisión también ha aprobado la reducción del intervalo entre la pauta completa y la dosis de refuerzo de seis a cinco meses, «en consonancia con lo que están haciendo otros países de nuestro entorno».
Además, se ha acordado que las personas inmunodeprimidas reciban una cuarta dosis de la vacuna contra la COVID-19 a los cinco meses de la última dosis. En este grupo se encuentran, entre otros, personas de muy alto riesgo, como aquellas con fibrosis quística, trasplante de progenitores hematopoyéticos, trasplante de órgano sólido y en lista de espera para trasplante de órgano sólido, trasplante pulmonar, renal, pancreático, cardíaco, hepático o intestinal.
También enfermos de diálisis de diversos grados, enfermedades oncohematológicas y diversos tipos de enfermos de cáncer con o sin quimioterapia, así como diversos casos de VIH, inmunodeficiencias o síndromes de Down mayores de 40 años.