La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha explicado que la decisión del Ejecutivo central de suprimir la obligatoriedad de llevar mascarilla en los espacios al aire libre a partir del próximo 26 de junio está «en sintonía» con las medidas anunciadas este jueves por el director general de Salud Pública del Gobierno aragonés, Francisco Falo.
La situación epidemiológica es «favorable», los espacios exteriores son espacios «de menos riesgo y el comportamiento de los virus en el periodo estival es más contenido», por lo que, la Administración autonómica asume esta medida anunciada este viernes por Pedro Sánchez «sin problemas».
«Comentamos ayer que no era obligatorio llevar las mascarillas en las piscinas, siempre que se con que se consiguiera mantener las distancias de seguridad», ha subrayado Repollés, apostillando que «en el momento de decidirse a nivel nacional la retira de las mascarillas en el exterior, Aragón estaba dispuesto y tiene las condiciones oportunas».
No obstante, ha recordado que estas órdenes recogen una serie de disposiciones «de mínimos» comunes a todo el país, donde siempre se tienen que cumplir unas circunstancias, como la distancia de seguridad entre las personas. No obstante, si así lo consideran las Comunidades, pueden endurecer esta normativa en sus respectivos territorios si no están de acuerdo con la misma.
En los eventos multitudinarios en el exterior y otras situaciones «todavía tendremos que utilizar mascarilla» pero «es un primer paso, que estamos dispuestos a dar» y con el que «estamos totalmente de acuerdo», siendo «un momento oportuno» para adoptar esta decisión, ha sentenciado la titular de Sanidad.