Los programas Desafío y Arraigo de prácticas universitarias de la Universidad de Zaragoza en la provincia de Teruel ya han cerrado la incorporación de 9 universitarios y un titulado en distintas actividades en el entorno rural después de una selección entre más de 200 solicitudes. El programa Desafío para estudiantes matriculados actualmente y con al menos 90 créditos cursados ha contado con 191 peticiones y el programa Arraigo, destinado a titulados en los últimos 3 años que estén vinculados con el territorio, con otras 28. Además, a día de hoy, han solicitado participar para ofrecer puestos de trabajo 42 empresas, entidades y administraciones públicas de la provincia.
Son las cifras provisionales de esta primera experiencia conjunta de la Universidad de Zaragoza y la Diputación de Teruel, formalizada con la firma de un convenio mediante el cual la institución provincial financia el programa con 20.000 euros. El objetivo primordial, señalan las cláusulas, es contribuir al reequilibrio territorial incentivando la llegada de capital humano al medio rural para dinamizar su tejido productivo, social e institucional.
El presidente de la Diputación de Teruel, Manuel Rando, la diputada de Educación, Bienestar Social e Igualdad, Susana Traver, y la vicerrectora de Estudiantes y Empleo de la Universidad de Zaragoza, Ángela Alcalá, la directora del servicio de empleo universitario Universa, Nieves García, y el vicerrector del Campus de Teruel, José Martín Albo, han presentado esta mañana los datos en el Palacio Provincial.
Para Rando, ésta es una iniciativa más «para hacer atractiva la provincia de Teruel, darle mayor visibilidad en todos los sentidos y, en este caso concreto, atraer nuevos pobladores con talento que, además, resuelvan posibles problemas de mano de obra cualificada que nos encontramos en el medio rural». El presidente ha hecho referencia a la experiencia original, la que se desarrollo en Zaragoza gracias también a la financiación de la Diputación Provincial.«Enseguida nos quisimos unir a este proyecto pionero, aunque se retrasó a causa de la pandemia. Ahora vemos con satisfacción que la idea se va a extender por España. De nuevo Aragón da un paso adelante en la innovación educativa».
El presidente de la DPT ha explicado que, en el análisis y el desarrollo de medidas encaminadas a frenar el proceso de despoblación y atraer y establecer actividades económicas y población en el medio rural, “esta es una medida más que contribuirá a una mayor creatividad y diversificación de nuestra economía. Solo con que algunos o algunas de los que realizan o realizarán las prácticas aquí vean de otra forma el medio rural y se planteen iniciar un proyecto de vida aquí, ya hemos ganado».
La vicerrectora de Estudiantes y Empleo de la Universidad de Zaragoza, Ángela Alcalá, ha asegurado que estos programas “tienen un fin dinamizador y de vinculación con el territorio porque tienen varios objetivos, entre los que destaca el aporte de conocimiento y creatividad de nuestros jóvenes”. “Hacen un binomio de convivencia y transferencia de conocimiento”, ha añadido antes de apuntar que con el proyecto “se conoce la realidad de los pueblos de Teruel”.
Alcalá ha compartido algunos datos sobre las experiencias de estudiantes en la provincia de Zaragoza, indicando que más del 90% de los estudiantes volverían a hacer las prácticas en los pueblos y el 100% de las empresas y entidades volverían a acoger al estudiantado. “Esto podría derivar en futuros contratos”, ha manifestado.
Menos de 1.000 habitantes
La condición principal de los programas Desafío y Arraigo en la provincia de Teruel estipula que estudiantes y titulados realizarán las practicas universitarias en localidades menores de 1.000 habitantes. Los siete estudiantes que ya han comenzado o van a comenzar en los próximos días han recalado en cuatro destinos: Ariño, Gea de Albarracín, Mosqueruela y Monroyo, y provienen de cinco grados diferentes: Ciencias Ambientales, Historia, Terapia Ocupacional, Administración y Dirección de Empresas y Fisioterapia.
En el caso del programa Desafío, las prácticas duran entre 150 y 320 horas, ofrecenmanutención de 20 euros al día y una bolsa de ayuda de 300 euros al mes con alta en la Seguridad Social. Los gastos de alojamiento, en la zona de realización de las prácticas, están cubiertos. En el caso del programa Arraigo, el titulado debe estar inscrito en Universa y en situación dedesempleo en el momento de comenzar la práctica, acreditando además su vinculación con el territorio y la residencia a una distancia inferior a 100 kilómetros del destino escogido. La duración máxima de las prácticas es de 350 horas y ofrece una bolsa de ayuda mensual de 600 euros al mes con alta en la Seguridad Social, además del pago de los desplazamientos.
Respecto a las entidades solicitantes de estudiantes o titulados en prácticas, los requisitos que deben cumplir son tener instalaciones en una localidad de la provincia de Teruel con menos de 1.000 habitantes y contar con menos de 50 trabajadores. Las empresas beneficiadas tan sólo deben abonar el coste de 50 euros por estudiante en concepto de gastos de gestión. Todavía pueden solicitar formar parte del programa, ya que continúa abierto hasta el mes de noviembre.
La diputada de Educación de la DPT, Susana Traver, ha señalado que, con estas prácticas, «lograremos que los estudiantes o titulados de la Universidad de Zaragoza conozcan el valor añadido que representa trabajar en nuestro medio rural. No solo la calidad del trabajo es excepcional, rodeados de un ambiente cálido y experimentado que les servirá para su desarrollo profesional, además nuestros pueblos gozan de estupendos servicios y unos parajes naturales excepcionales».
Traver también ha hecho hincapié en los requisitos de selección de empresas o puestos de trabajo, que pretenden maximizar el apoyo al medio rural otorgando mayor puntuación a los municipios más pequeños, por ejemplo. También se tienen muy en cuenta las necesidades laborales de la provincia, dando especial importancia, por ejemplo, a las ramas sociosanitaria o agroalimentaria.