Tres tramos de carreteras secundarias aragonesas, uno en la provincia de Teruel y dos en la de Huesca, van a contar con una nueva señalización que los identificará como puntos de especial riesgo para los motoristas, con el objetivo de advertir a esos conductores de la necesidad de extremar la precaución cuando se circule por ellos.
El tramo turolense está en la A-226, del km 22,62 al 24,62; y forma parte de un total de 100 puntos repartidos por todo el territorio nacional e identificados como los más peligrosos para las motos. Todos tienen una longitud aproximada de 2 km y han sido seleccionados con criterios de sinuosidad, así como por la accidentalidad del tramo en los últimos cinco años.
La DGT instalará en ellos una señal vertical que se colocará al inicio del tramo y que informará del número de motoristas accidentados (fallecidos y heridos) registrados allí en los últimos cinco años. Este dato se revisará anualmente para, si fuera necesario, actualizar la información de la señal.