La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, acompañada de la teniente de alcalde Rocío Féliz de Vargas, mantuvo un encuentro esta semana con las monjas que gestionan el Hogar San José con el fin de “una vez normalizada la situación”, interesarse por el estado de salud “de todos los residentes y de ellas mismas”, y a la vez reconocer la labor “que durante décadas y décadas las monjas del Hogar San José han estado realizando en nuestra ciudad cuidando de nuestros mayores como si se tratara de su propia familia, con una atención y un cariño especial”.
El encuentro se produjo en el exterior de la residencia, al aire libre, con el fin de tomar las máximas precauciones y evitar contactos con los mayores. “Han sido momentos muy difíciles para todas las residencias y para toda la sociedad en general, y desde el Ayuntamiento de Teruel, desde el minuto uno, hemos estado apoyando a las residencias, en este caso cuando fue necesario con EPI’s así lo hicimos gracias también a la generosidad de empresas que quisieron colaborar”, explicaba la alcaldesa al finalizar la reunión.
Buj también recordaba que hubo una serie de trabajadoras del Centro de Día Santa Emerenciana y de ayuda a domicilio que han estado trabajando durante el estado de alarma en el Hogar San José, a las que está muy agradecida. “Son, y han sido en estos momentos duros, grandes profesionales, se han volcado en su labor y desde aquí mi máximo agradecimiento y reconocimiento a todas ellas”, indicaba.
Por último, la alcaldesa se puso una vez más a disposición del Hogar San José para todo aquello que pudieran necesitar a partir de ahora, deseando fervientemente que esta residencia de ancianos siga libre de coronavirus, deseo que hace extensible al resto de la ciudad.