La provincia de Teruel dispone en la actualidad de 21 cuadrillas terrestres para la prevención y extinción de incendios forestales, de las cuales 3 son dobles y otras 3 helitransportadas. Una serie de medios que, unidos a los de Huesca y Zaragoza, hacen un total de 62 retenes en el conjunto de la Comunidad.
Esta situación, lejos de mejorar, esta cerca de sufrir un serio recorte debido a las intenciones de la Dirección General de Medio Natural y Medio Forestal, perteneciente a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, de acometer un agrupamiento y reubicación de los centros de trabajo. Un hecho que provocará una peor disposición de los medios personales y materiales para poder afrontar las incidencias que se produzcan en nuestros montes y espacios naturales.
Ante esta situación, el Grupo Popular en la Diputación de Teruel ha presentado una propuesta para su debate en el próximo pleno de la institución en la que solicitan que el diseño del operativo de prevención de incendios forestales se fije exclusivamente por “criterios técnicos y cercanía al territorio”. Es por ello por lo que en el texto se reclama instar al Gobierno de Aragón a paralizar el proceso en el que actualmente se encuentran inmersos.
El diputado provincial del PP, Francisco Narro, ha lamentado que el nuevo diseño planteado, del que han tenido conocimiento los municipios que recibirían los nuevos retenes, pero no así aquellas localidades que verían suprimidas sus cuadrillas, supone una decisión “completamente errónea”. “Todas las medidas que deben adoptar los gobiernos tienen que ir destinadas a mejorar el servicio pero en este caso van a conseguir exactamente lo contrario: empeorar la ubicación de los medios forestales y estar en peor disposición para poder atender los incendios que se produzcan en el territorio”, ha recalcado.
Los propios profesionales del servicio, así como los municipios del territorio, han realizado un análisis pormenorizado de la distribución que ha planteado el Ejecutivo regional y de las consecuencias que tendría su implantación. En materia operativa, Narro advierteque alejar las cuadrillas de las masas forestales en las que se producen los incendios “provocará que haya un mayor tiempo de respuesta y que los conatos que se pudieran producir puedan generar muchos más daños”, además de que esta nueva distribución geográfica generará unos mayores desplazamientos, lo que para el diputado ‘popular’ “provocará directamente que los diferentes efectivos tengan menos tiempo de trabajo efectivo en materias tan importantes como la prevención”. “Lo que consiguen con ello es ser menos eficaces en el gasto del dinero público”, ha ahondado.
Dentro del capítulo de perjuicios, el representante del Grupo Popular en la Diputación de Teruel también ha apuntado que esta nueva distribución también va en contra de la lucha contra la despoblación. “Se les llena la boca de hablar de combatirla pero con decisiones como las que quieren implantar en materia forestal lo único que demuestran es que quieren favorecer el desplazamiento de las cuadrillas de los pueblos pequeños a los más grandes, saliendo de nuevo perjudicados los municipios de menor tamaño y población”, ha señalado.