El Museo de Teruel muestra a partir del próximo 16 de octubre la exposición “Negro Esperanza” del artista nacido en Aliaga Miguel Ángel Encuentra, con la que se retoman las propuestas del espacio de exposiciones temporales en este centro expositivo de la Diputación de Teruel. La apertura oficial contará con la presencia del autor que ha concebido esta muestra, iniciada en el año 2000, como “fruto de una constante evolución” que se extiende hasta el año veintiuno de este siglo XXI, tal y como recoge el catálogo de la muestra.
El artista realizará además una visita comentada a la exposición el viernes 16 de octubre a las 20 horas y el sábado 17 de octubre a las 12 horas. Para participar es necesario reservar enviando un correo electrónico a la dirección museo@dpteruel.es, indicando nombre día de la visita y teléfono de contacto.
El horario de la exposición será de martes a viernes de 10 a 14 horas y de 16 a 21 horas y los sábados y domingos, de 10 a 14 horas. Los domingos podrá verse de 10 a 14 horas y de 16 a 19 horas, mientras que el lunes permane cerá cerrado.
Miguel Ángel Encuentra nació en Aliaga (Teruel) en 1951. Actualmente reside en Barbastro, ciudad en la que continúa una labor artística que comenzó en 1969, y que pronto le reportaría los primeros reconocimientos. Preocupado por su formación técnica mantiene de forma autodidacta una experimentación permanente a la que hay que sumar su paso por la Facultad de Bellas Artes de Valencia en 1985.
Sus obras han sido presentadas en diversiones espacios expositivos dentro y fuera de España, obteniendo sucesivos premios. Si bien, desde 1982 deja de participar en certámenes de índole competitivo por voluntad propia. Elemento recurrente de su trayectoria pictórica, desde fines de los pasados noventa, es el carácter monográfico de sus exposiciones. Un ciclo en el que destacan creaciones como “Del Espacio…la Penumbra”, “Eclipses”, “Realidad Pirenaica -de especial significado en la vida y la obra del artista-”, “Procesos diverSOS”, “YI”, así como la obra que ahora se presenta en el museo “Negro Esperanza”.
Iniciada en el año 2000, esta muestra es fruto de una constante evolución que, premeditada y simbólicamente, se extiende hasta el año veintiuno de este siglo XXI. En consonancia pues con esa intención simbólica, la obra se compone de veintiuna piezas variables cuya dimensión total es de veintiún metros de largo por un metro cincuenta de ancho.
Tal y como se recoge en el catálogo con el que se presenta la muestra, estética y conceptualmente la obra presenta una relación indisoluble basada en cuatro ejes fundamentales: la constatación del poder de una Naturaleza sublime que, mancillada por el hombre, regresa airada para socavar y aplacar la soberbia humana; la crítica del sistema capitalista imperante, representado en la pintura por esa gráfica roja que la recorre y la somete, lo mismo que nuestras vidas; el reflejo en su proceso descriptivo del concepto cíclico del tiempo en el que el principio es igual al fin, como el recorrido de nuestra vida y su sentido.
Una situación que se significa llena de esfuerzo en la situación actual y que nos fuerza a una continua lucha transformadora; por último, una invitación a transitar por la obra, sumándonos a la reflexión, mirando de frente Negro esperanza, conscientes de que entre su diversidad cromática está presente ese tono que debe bascular del lado de la esperanza.