El Ayuntamiento de Teruel aplicará un tratamiento de nanopintura a todos los parques infantiles de la ciudad, tanto a los de los barrios rurales como a los de los urbanos, para proteger estas instalaciones de virus y bacterias como el coronavirus.
La nanopintura microscópica es invisible y fotocatalítica, es decir, genera una reacción con los rayos del sol que elimina las bacterias y los virus. Además, transforma el dióxido de carbono en oxígeno, al igual que los árboles, por lo que es un producto beneficioso para el medio ambiente que condensa la suciedad y no deja que se pose en la superficie pintada. Esto propicia que los parques ya no necesiten las desinfecciones que se estaban realizando hasta ahora de manera constante.
El concejal de Barrios Rurales, Carlos Aranda, ha recordado que los parques de Villaspesa, San Blas y El Campillo ya cuentan con este tratamiento. “Para combatir la pandemia es necesario aprovechar las soluciones que nos aporta la tecnología y la ciencia. Dentro de poco llega el buen tiempo y, previsiblemente, las restricciones sanitarias se relajarán, por lo que trabajamos para aumentar la seguridad en unos parques que albergarán a muchos niños”, ha añadido.