En el marco del proyecto Puentes de Confianza financiado por la Comisión Europea por el proyecto UE-LEAD y que cuenta con la participación de la FEMP como miembro del Consejo de Municipios y Regiones de Europa (CMRE) que lidera el proyecto junto a la Asociación de Ciudades Ucranianas, ha comenzado este jueves la ronda de reuniones bilaterales entre alcaldes y alcaldesas de las seis ciudades que forman parte de este proyecto piloto con el encuentro telemático entre la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, y el alcalde de Malyn, Oleksandr Sytailo.
Esta reunión es el punto de partida en la construcción de la una relación solida entre ambos gobiernos locales con el objetivo de apoyar a la ciudad de Malyn, víctima de la ocupación rusa, en su reconstrucción, con especial atención en las infraestructuras publicas y en la vivienda.
El siguiente paso, una vez que ambas ciudades acuerden el ámbito concreto de colaboración, será la preparación de una visita técnica a finales de septiembre con el objetivo delograr un intercambio de experiencias entre ambos municipios, destacando las fortalezas de la gestión local de Teruel y que se coordina desde la FEMP, a cuya sede asistirá la delegación ucraniana antes de partir a su ciudad hermana. La finalidad será la elaboración de una propuesta de proyecto en común que facilite la captación de fondos dirigidos a la reconstrucción de la ciudad.
Las otras ciudades que participan son Soria y Pidhorodne, que mantendrán un encuentro similar este viernes 28 de julio, y Azuqueca de Henares y Bohorukhin que lo harán el 7 de agosto.
Ciudad solidaria
La alcaldesa de Teruel explicaba tras la reunión que aceptó participar en este programa inmediatamente en cuanto se lo propusieron “porque Teruel es una ciudad extraordinariamente solidaria, lo hemos demostrado siempre, y nos volcamos también en ayudar en la guerra de Ucrania a través del Ayuntamiento y de la comunidad ucraniana que vive en nuestra ciudad”.
“Para mí era imposible decir que no a esta propuesta, puesto que Teruel es una ciudad que ha sido reconstruida después de una guerra que causó estragos, cómo nocolaborar en la reconstrucción de una ciudad que en este caso está sufriendo debido a una invasión”, añadía, deseando que se trate de una colaboración “fructífera” para ambas ciudades.
El papel de la FEMP es el coordinar este proceso de colaboración entre las ciudades españolas y ucranianas como motor del cambio basado en la gestión municipal. Una vez más, la FEMP y la Unión Europea caminan en sintonía para garantizar las condiciones de vida de la ciudadanía más vulnerable. Sin duda, la cooperación entre ciudades ucranianas y europeas en la mejora de las condiciones de vida y de habitabilidad es una de las líneas impulsadas por Europa para solventar las consecuencias de la guerra y fortalecer las políticas públicas locales.
Teruel fue una de las ciudades que acogió a refugiados ucranianos tras el estallido de la guerra, y en estos momentos son 303 las personas de esa nacionalidad que residen en la capital turolense.
