Con nervios, sí, pero sobre todo con esperanza e ilusión. Así han recibido esta mañana Emilia Nájera, de 80 años, la primera vacuna contra el coronavirus que se ha administrado en Aragón. Se trata de una residente de 80 años que lleva desde el año 2008 en el centro. Le ha seguido Manuel Cebolla, un residente muy querido en Romareda, que tiene 84 años y vive en la residencia desde 2011 con su mujer; y Carmen Emetérea García, de 81 años, procedente de Teruel y que vive en este centro desde hace más de un año con su marido. Ellos tres han recibido las primeras dosis de las vacunas de Pzifer contra la Covid 19 que hoy mismo han llegado Aragón y que durante esta jornada se distribuirán en un centro residencial de cada una de las provincias aragonesas (por la tarde será en el Asilo San José de Teruel y en la Residencia Somontano de Barbastro de Huesca).
“Tenemos que ser los primeros en vacunarnos para poder cuidar de los nietos y de los hijos, y para poder abrazarnos, que estamos faltos de abrazos”, ha dicho Emilia nada más recibir la vacuna. Manuel también ha expresado su ilusión: “A ver si con esto matamos al bicho”, ha asegurado tras recibir un pinchazo “que no ha dolido”. Tampoco a Carmen, que tenía clarísima la importancia de vacunarse, le ha dolido: “somos muchos y tenemos que vencer al bicho”, ha asegurado. Un momento que Emilia, Manuel y Carmen han compartido con las personas con las que también comparten la vida: dos de los trabajadores de la residencia Romareda del IASS: María Sanz y Fernando Artal. “Queríamos dar ejemplo y transmitir confianza a toda la sociedad, para transmitir que esta vacuna es útil y necesaria. Estamos emocionados y felices”, han afirmado ambos.
En total, hoy han llegado a Aragón 63 viales, que suponen dosis para vacunar a 315 personas y que se han repartido así: en la residencia de Barbastro 50 (33 residentes y 17 enfermeras), en la de Teruel 117 (95 residentes y 22 trabajadores), en la residencia Romareda 116 (en total se vacunarán 169 residentes y 155 trabajadores) y 20 en el Camp. Las vacunas han llegado hoy procedentes de Guadalajara a las nueve de la mañana al Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, donde se encuentra el punto de almacenaje para todo Aragón. Una vez allí, el servicio de Farmacia ha sido el encargado de preparar los cuatro envíos para las residencias que comenzaban ya la vacunación, donde han sido transportadas en condiciones de refrigeración de entre 2 y 8 grados centígrados. Como ocurrirá con todas las residencias, los equipos de enfermería de los correspondientes centros de salud se han desplazado al centro residencial para realizar la vacunación. Estos centros de salud han sido: Barbastro, Teruel Ensanche, Fernando el Católico (Romareda) y Parque Goya (Camp).
Durante las próximas semanas se vacunarán en los centros residenciales más de 25.000 personas que ya han dado su autorización para ello (cabe recordar que el 93% de los residentes de Aragón ha dado su consentimiento a recibir la vacuna, el 5% la ha rechazado y hay un 2% que se mantiene pendiente de tomar la decisión. Por lo que respecta a los trabajadores, el 80% ha admitido la vacunación, el 14% la ha rechazado y 6 % está pendiente de pronunciarse). De este modo, en la provincia de Huesca ya han autorizado 3.059 residentes y 1.901 trabajadores (el 88,3% y el 73,6% respectivamente), en la de Teruel 2.060 residentes y 1.574 trabajadores (el 87% y el 76%, respectivamente), y en la de Zaragoza 10.117 residentes y 6.617 trabajadores (el 87,8% y el 76,2%, respectivamente).
Cabe recordar que, en las últimas semanas, las residencias, con la colaboración del Departamento de Ciudadanía, han actualizado, a través de la aplicación web de notificación, registro y análisis de los casos COVID en los centros sociales residenciales (Sircovid), los residentes y trabajadores que han dado su autorización para recibir la vacuna. A partir de esta información, los centros de salud van a ir estableciendo su planificación semanal, que tendrán que ir comunicando semanalmente a la central de almacenamiento y distribución, haciendo constar las residencias a vacunar a partir de las agendas generadas y obtenidas desde un apartado específico de Sircovid. Como regla general, se planificará la vacunación de lunes a jueves, dedicando el viernes a la recuperación de las posibles dosis no utilizadas por diferentes motivos, como negativas a vacunarse en el último momento o cuadros agudos que impidan la vacunación.
Tal como ya se anunció, la vacunación comenzará por las residencias que se encuentres libres de covid, y en estos momentos hay 40 centros en la Comunidad que tienen un brote abierto. Estos podrán recibir la inoculación conforme los brotes se vayan cerrando. En Aragón, la previsión es que en las primeras semanas lleguen 12.000 dosis semanales de la primera vacuna autorizada (BNT162b2 de Pfizer BionTech), con las que se vacunará a residentes y trabajadores sociosanitarios de las dos dosis recomendadas.
Como ya se ha explicado, la primera fase de la vacunación está dirigida a residentes y personal sanitario y sociosanitario que trabaja en residencias de personas mayores y de atención a discapacitados. A este colectivo le seguirá el personal del ámbito sanitario y las personas consideradas grandes dependientes, con necesidad de intensas medidas de apoyo, que no estén actualmente institucionalizadas. Las siguientes fases irán entrando en calendario escalonadamente en los próximos meses según sea la disponibilidad de las vacunas.
La vacunación pivotará en torno a la Atención Primaria -y a los servicios de Prevención de Riesgos Laborales en el caso de los trabajadores sanitarios-, y ha requerido una logística especial por las características de la vacuna. En Aragón existirá un único punto de almacenaje en el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, donde ya se han instalado los dos ultracongeladores capaces de mantener las dosis recibidas a una temperatura de -80 grados. De ahí serán distribuidas a los centros de salud a través de tres rutas urbanas en la ciudad de Zaragoza y de otras 15 rutas en el resto del territorio.
Este transporte se realizará en un tiempo máximo de ruta de 7 horas en condiciones de refrigeración de entre 2 y 8 grados. Una vez en el centro, las vacunas se podrán mantener en esas mismas condiciones de refrigeración durante un máximo de 120 horas desde la recepción. La distribución del material auxiliar (jeringas y agujas) necesario se llevará a cabo desde los almacenes centrales del Servicio Aragonés de Salud, ubicado en la plataforma logística de Zaragoza PLAZA.
Cuando la campaña de vacunación se abra a otros colectivos en los próximos meses, cada centro de salud deberá tener la previsión de cuántas dosis va a necesitar en esas horas que siguen a la recepción de la vacuna, para solicitar esa cantidad concreta, en un sistema semanal similar al de las residencias. Esa información se obtendrá a partir de un sistema de cita previa para los usuarios que se está articulando en Salud Informa y que empezará a funcionar cuando la vacunación pase a las siguientes fases (en residencias y personal sanitario no es necesario). Cada centro de salud establecerá su agenda, dimensionada de acuerdo con su capacidad de vacunación.