Trabajadores afectados por el cierre de la Central Térmica de Andorra se han concentrado este martes, 30 de junio, a las puertas de la carboeléctrica de Endesa para criticar la falta de alternativas laborales que hay en la zona. Según los convocantes, unas 500 personas han participado en esta protesta.
Este martes es el último día en el que la térmica permanecerá abierta, ya que tiene que cerrar sus puertas al no cumplir con la nueva normativa medioambiental europea de emisiones industriales. Desde las 10.00 horas de hoy, representantes sindicales y trabajadores han recorrido la localidad andorrana llamando a la participación ciudadana en la concentración convocada para despedir al último turno de empleados que ha trabajado en la instalación.
Endesa ha puesto en marcha una serie de cursos para el desmantelamiento de la central y para el montaje de paneles solares para trabajadores afectados por el cierre de la central. Sin embargo, los representantes sindicales han criticado que no haya un compromiso de contratación para las personas que realizan esta formación.