El presidente de la Diputación de Teruel, Manuel Rando, ha enviado una carta a la ministra de Hacienda del Gobierno de España, María Jesús Montero, para pedirle “la mayor celeridad posible” en la aprobación del Decreto o la toma de decisiones necesaria para que las entidades locales puedan disponer de sus remanentes y ahorros. Rando ha transmitido su preocupación por lo que el retraso en la autorización del uso de estos fondos por los ayuntamientos o la diputaciones pueda suponer “para el cumplimiento de los plazos de ejecución”
Rando señala en la misiva, que se registró en el Ministerio el pasado viernes, que “ninguna institución conoce mejor que las necesidades de esta provincia y, especialmente, del medio rural como la Diputación y los ayuntamientos” para hacer frente no solo a las consecuencias de la pandemia de la Covid-19 sino también, recuerda el presidente, de los efectos de la tormenta Gloria.
El presidente de la Diputación de Teruel pone también el acento en la importancia de que “los ayuntamientos puedan decidir libremente el destino de sus inversiones”. Apunta a las condiciones que estableció el Ministerio de Hacienda para el uso de parte del superávit de 2019 y pone como ejemplo las exigencias en cuanto a movilidad para señalar que “las necesidades y prioridades de nuestro medio rural son completamente distintas a las del medio urbano”-
En la carta enviada a la ministra Montero, Manuel Rando ensalza el papel de los ayuntamientos desde que comenzó la pandemia y recuerda que la institución que preside ya ha aprobado en este año tres declaraciones institucionales, por unanimidad de todos los grupos políticos, que instaban al Gobierno de España a no detraer el superávit acumulado por las entidades locales o adoptar medidas de flexibilización del impacto de la estabilidad presupuestaria y la regla de gasto.
Rando señala al final del escrito que “el tiempo apremia y las medidas necesarias no solo necesitan de ese dinero, sino del plazo de ejecución preciso. No podemos perder la oportunidad de dar una respuesta rápida y eficaz a nuestros convecinos con nuestros propios recursos, más necesarios que nunca” y, además de la mayor celeridad posible en la autorización para utilizar los remanentes y el ahorro, solicita al menos “un gesto” que alivie la incertidumbre de alcaldes-as y concejales-as.