El alcalde de Andorra, Antonio Amador, el director gerente del INAEM, Raúl Camarón, y el director general de Endesa en Aragón, Ignacio Montaner, han presentado hoy en el Ayuntamiento de Andorra, los cursos de formación para trabajadores afectados por el cierre de la Central Térmica.
Esta acción formativa, que tiene por objeto mejorar la confianza, el arraigo con la comunidad local y la empleabilidad de los trabajadores de la zona, es una de las medidas de creación de valor compartido contempladas en el plan Futur- e de Endesa.
La presentación se realiza en el marco del acuerdo de colaboración entre el Instituto Aragonés de Empleo (INAEM), el Ayuntamiento de Andorra y Endesa y se materializará en la realización de acciones formativas estructuradas en tres programas de formación profesional en los que participarán 950 alumnos que serán seleccionados por el INAEM.
El primero de los cursos comenzará el próximo 29 de junio. Está centrado en tareas de desmantelamiento de las instalaciones de la central, en concreto en la prevención de riesgos laborales, y contará con la participación de 200 alumnos, repartidos en 4 convocatorias; el segundo, dirigido al montaje de placas solares se extenderá a 600 alumnos en 12 convocatorias y el tercero, del que se realizarán 6 convocatorias, será un curso de operación y mantenimiento de plantas eólicas y solares en el que participarán 150 alumnos.
Los cursos de desmantelamiento serán impartidos por SGS Tecnos y Quirón Prevención. Contemplan un módulo de formación de riesgos básicos, de 60 horas, módulos de formación específica en trabajos de demolición, de 43 horas, formación en primeros auxilios, 20 horas, y 77 horas más de formación complementaria. Su finalización está prevista para mayo de 2021.
Los cursos de montaje de paneles solares, de 48 horas, y de operación y mantenimiento de plantas eólicas y solares, de 90 horas (30 de ellas, prácticas) serán impartidos por laempresa Ekypo, que ya ha participado en anteriores formaciones de Endesa, y se extenderán hasta diciembre de 2021.
El INAEM se encargará de la selección de los participantes en los cursos, de acuerdo con una serie de criterios que priorizarán a los trabajadores que, actualmente o con anterioridad, hayan mantenido una relación laboral con las empresas subcontratadas por la central térmica. También se dará prioridad en el proceso de selección a las personas desempleadas y en búsqueda de empleo con domicilio en Andorra, a las mujeres, a los parados de larga duración y al resto de interesados procedentes de las comarcas de Andorra-Sierra de Arcos, Bajo Martín, Cuencas Mineras y Bajo Aragón.
Plan Futur-e de Endesa
El Plan de Futuro de Endesa incluye la recolocación de los 153 empleados de la central, así como dar total prioridad a la contratación de trabajadores de las actuales empresas auxiliares para el desarrollo de las actividades de cierre y desmantelamiento de la planta, que se prolongarán durante un periodo aproximado de entre 4 y 6 años, y que generarán alrededor de 130 empleos.
A los empleados de la central se les están ofreciendo recolocaciones, de manera personalizada, en distintos puestos de trabajo de la compañía según sus funciones, siempre teniendo en cuenta la proximidad geográfica a su actual entorno laboral. También se considerará su incorporación a los trabajos derivados del cierre y desmantelamiento de las instalaciones.
Los trabajadores de las empresas contratistas tendrán la oportunidad de realizar cursos de formación, tanto para sumarse a esos trabajos como para poder ser contratados en las nuevas instalaciones renovables que la empresa desarrollará en la zona. Hasta el momento, sin contar los cursos que se presentan hoy, se han realizo seis formacionesrelacionadas con el montaje de paneles solares y de supervisión, operación y mantenimiento de parques eólicos.
El Plan Futur-e de Endesa tiene como objetivo final la construcción de 1.725 MW de potencia, de los que cuales 1.585 MW corresponderán a plantas fotovoltaicas y 140 MW a parques eólicos. Adicionalmente, se instalarán 160 megavatios de almacenamiento en baterías. El proyecto, que se ha diseñado en tres fases, finalizará en 2026.
La realización de estas instalaciones generará 4.014 empleos en la etapa de construcción y 138 empleos durante más de 25 años en las actividades de operación y mantenimiento de las plantas.
La primera fase, que se iniciará en enero 2021 y finalizará a principios de 2022, contempla la construcción de un parque fotovoltaico de 50 MW (presentado a tramitación administrativa), que se construirá dentro del perímetro de la actual central térmica, y la construcción de un parque eólico, de 49,4 MW de potencia (presentado también a tramitación administrativa), que se instalará en el término municipal de Ejulve.
La segunda fase prevé impulsar 235 megavatios de energía solar fotovoltaica y 54,3 MW de almacenamiento en baterías, y se instalará en gran medida dentro del perímetro de la actual central térmica. Se desarrollará a lo largo de 15 meses, entre marzo de 2022 y junio de 2023.
Para las dos primeras fases, Endesa ya posee punto de conexión, mientras que la tercera fase –de 1.390 megavatios–, depende de la asignación por parte del Ministerio para la Transición Ecológica de la capacidad de evacuación de la central térmica de Andorra.
En la mencionada tercera y última fase, que se iniciaría en mayo de 2023 y finalizaría a principios de 2026, se construirían 1.300 MW de potencia fotovoltaica, 90 MW de energía eólica y 105 MW de almacenamiento en baterías. La potencia asociada a estas fases se construiría en terrenos de los términos municipales de Andorra, Alcorisa, Alcañiz, Calanda e Híjar.
Estos proyectos de energías renovables son adicionales a los que la empresa está realizando en Aragón. Concretamente, Endesa conectó a la red en 2019 trece parques eólicos situados en las provincias de Teruel y Zaragoza, con una potencia total conjunta de 424 MW. Corresponden a la potencia que se adjudicó la compañía en la subasta de energías renovables organizada por el Gobierno en 2017.
Además, la empresa va a construir en 2020 en Zaragoza y Teruel parques eólicos con una potencia total de 82 MW. Todos estos planes de construcción de energías renovables vienen acompañados de sus correspondientes Planes CSV(Creación de Valor Compartido). Los planes CSV son diseñados junto con los agentes del entorno y su objetivo último es maximizar el impacto socio-económico que los proyectos tienen en la comunidad.
La construcción de esta nueva potencia, facilitará importantes recursos a los municipios mencionados a través de los impuestos y tasas correspondientes, así como elevados ingresos en concepto de alquileres a los propietarios de los terrenos en los que sea ubicada.
La puesta en marcha de esta capacidad renovable responde a la estrategia de Endesa de descarbonizar plenamente su mix de generación en 2050, un proceso para el que, según el último Plan Estratégico de la empresa, se ha marcado el próximo hito de alcanzar 10,2 GW de capacidad instalada renovable en 2022, frente a los 7,4 GW estimados para final de 2019, con una inversión total de unos 3.800 millones de euros.