El pleno del Ayuntamiento de Teruel ha aprobado este jueves por unanimidad una revisión extraordinaria de las tarifas del servicio público de abastecimiento domiciliario de agua potable y alcantarillado de conformidad con el acuerdo alcanzado entre el consistorio y la UTE Aguas de Teruel SA en ejecución de una sentencia.
Según ese acuerdo acuerdo, se reduce el aumento del recibo fijado en una sentencia del 26 al 2%. La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, indicaba en el pleno que éste es el último paso de la ejecución de una sentencia que obligaba al Ayuntamiento de Teruel a subir el agua un 26%, “derivada de una adjudicación que hizo una corporación anterior gobernada por el PSOE y el PAR”, si bien ha señalado que los miembros de la corporación actual “o no estaban o no tuvieron una participación directa en esa adjudicación”. Buj agradecía a todos los grupos municipales su “sentido de Estado” al aprobar este punto que se refiere a un asunto “altamente delicado”, en un momento además en el que la luz o el gas “están subiendo extraordinariamente, y gracias a una dura negociación y a un buen acuerdo”, la subida de la tarifa del agua se reduce a “un mínimo 2%”.
El 23 de julio de 2010 se adjudicó el contrato de concesión del servicio de abastecimiento y alcantarillado de la ciudad de Teruel con los únicos votos a favor del entonces equipo de gobierno PAR-PSOE, y la abstención del PP “por no ver clara la situación administrativa del expediente, ya que tresfuncionarios municipales votaron en contra de la adjudicación en la mesa de contratación y la adjudicación se decidió por el voto de calidad del alcalde Miguel Ferrer”, recordaba la alcaldesa en su día cuando se anunció el actual acuerdo con la empresa de aguas.
Según explicó entonces la alcaldesa, la sentencia dicta que la adjudicación se basó en un pliego con datos de consumo de agua no reales ya que el anteproyecto parte de un consumo de 2.921.135 m3/anual cuando el consumo real al año era de 2.569.928 m3. Además se preveía un incremento del consumo de agua del 1,5% anual cuando en los tres años anteriores a la concesión el consumo había bajado un -4.8% en 2009 , -1,8% en 2008 y -3,8% en 2007. Como consecuencia de todo ello, la sentencia obliga al Ayuntamiento a aprobar una subida extraordinaria del agua del 26%.
“Fruto de un año de intensa negociación, la tarifa del agua, que lleva congelada desde 2015, se incrementará tan sólo un 2%”, indicaba,