La Junta directiva de la Asociación de Empresarios Turísticos de la Sierra de Albarracín (AETSA) acordó por unanimidad mostrarse en contra del modelo con el que se quieren imponer las energías renovables en esta comarca turolense por ser incompatible con el modelo turístico desarrollado en el territorio y con otros usos que se hacen del mismo.
Actualmente ya hay un proyecto aprobado y declarado de utilidad pública, el Parque Eólico Santos de la Piedra, que afecta a los municipios de Pozondón, Bronchales, Albarracín y Santa Eulalia; este parque, promovido por la mercantil Cyopsa El Molino Energía Eólica, S.A., podría haberse vendido ya a un fondo, según informaciones que maneja AETSA. Este parque contaría con una segunda fase de cuyo desarrollo no se tiene conocimiento por el momento.
A este proyecto se suma ahora uno de mayor envergadura, presentado por Forestalia. Este megaproyecto que, por dimensiones, podría ser similar al que la misma empresa presentó en la Comarca del Maestrazgo, proyecta parquesen los municipios de Bronchales (que sería el límite sur), Orihuela del Tremedal, Rodenas, Monterde de Albarracín, Albarracín, Peracense…, hasta Ojos Negros, zona en la que también se incluiría una planta fotovoltaica.
La Asociación empresarial, hasta el momento, solo ha sido informada por el Ayuntamiento de Bronchales, municipio en el que hay proyectados 13 aerogeneradores de grandes dimensiones a escasos kilómetros del pueblo.
Para AETSA, este modelo de desarrollo de las renovables, concentrado en grandes empresas y con un fuerte componente especulativo, no es compatible con el desarrollo de turismo sostenible que está viviendo esta comarca. Proyectos como la Reserva y Destino Starlight, el proyecto de turismo ornitológico “El Despertar del Páramo”, el incipiente crecimiento del turismo deportivo que experimenta Bronchales y otros municipios de la comarca, las consolidadas actividades de ecoturismo, el proyecto de turismo ecuestre (al que se va a dedicar el FITE este año), las posibilidades de municipios como Rodenas, que a juicio de la Asociación debería estar integrado en la red de pueblos más bonitos de España, o el Castillo de Peracense, que, tras años de restauraciones y trabajos de promoción, por fin ha alcanzado repercusión y vive un dulce momento, se verían seriamente afectados en caso de seguir adelante con este macroproyecto.
Todas estas actividades están generando dinamismo no solo económico, sino también social, ya que el empresariado turístico es de los pocos sectores que, además de trabajar, vive mayoritariamente en la comarca, explican desde la Asociación. Además de este sector, otros como la agricultura, la ganadería, o la propia embotelladora de agua de Bronchales podrían verse afectados con la instalación de aerogeneradores.
Representantes de la Asociación instan a los Ayuntamientos a que se informen adecuadamente sobre lo que este proceso podría suponer para sus municipios, ya que los beneficios económicos (por ahora lo único que Forestalia ha explicado a los alcaldes) pueden no ser tantos si suponen una afección a sectores ya implantados, y, en cambio, sí supondrían una pérdida en cuanto a población activa. Además, alertan sobre la fractura social que ya se está produciendo en otras comarcas turolenses y que también supone una merma en la calidad de vida que tiene ahora esta serranía. La Asociación se ofrece a los Ayuntamientos, como ya lo ha venido haciendo a lo largo de su trayectoria, para ayudarles a buscar en el turismo otras vías de ingresos y desarrollo que no se enfrenten con sectores ya consolidados.
Siguiendo esta línea de trabajo, la Asociación han organizado, junto con el Ayuntamiento de Bronchales y la Plataforma a favor de los paisajes de Teruel, una charla informativa que tendrá lugar el próximo sábado día 4 de diciembre en Bronchales con el fin de informar a la población sobre este asunto.
Explican también que, impulsado por la Comunidad de Albarracín, se está haciendo un estudio para implantar redes de calor en los municipios; por otro lado, diversas empresas y particulares ya están colocando paneles solares en sus tejados, un modelo por el que sí apuesta esta Asociación, que se muestra a favor de las renovables, pero siguiendo el modelo del autoconsumo y la generación distribuida que no tienen impactos negativos para la biodiversidad y el paisaje, dos de los ejes en los que se basa el turismo de la Sierra de Albarracín.
A juicio de los representantes de esta Asociación, en la comarca de la Sierra de Albarracín debería seguirse el modelo de unión y orgullo territorial que ha mostrado la Comarca del Matarraña frente al desembarco eólico.
La Asociación está integrada, desde sus inicios, en la Plataforma a favor de los paisajes de Teruel (junto a otras asociaciones turísticas provinciales) y ya firmó en su momento la Moratoria de todos los proyectos de parques eólicos y fotovoltaicos, así como de sus líneas de evacuación y subestaciones, para llevar a cabo un Plan de ordenación territorial de los recursos energéticos. Tanto la petición de Moratoria como la de redacción del Plan de ordenación se presentaron al Gobierno de Aragón, quien aprobó la redacción del Plan, pero no la Moratoria.
“La Sierra de Albarracín es una joya en cuanto a biodiversidad y paisaje, que se complementa con la arquitectura única (modelo de conservación) de la ciudad de Albarracín” explican fuentes de la Asociación. “No podemos perder ahora todos estos valores que han mantenido a muchos negocios familiares (70 empresas integran ahora la Asociación), esos valores por los que se nos conoce ya internacionalmente, para que una empresa y un fondo ganen dinero. La lucha contra el cambio climático debe hacerse de otro modo, no a costa de sacrificar la España interior”.