“Le pedimos al equipo de gobierno que deje de vender y se dedique a hacer”. Con esas palabras han querido denunciar los portavoces del Partido Popular en la Diputación Provincial de Teruel un hecho desconocido hasta la fecha y de enorme gravedad: que todos los municipios del territorio llevan más de un año sin recibir un solo euro para inversiones por parte de la institución.
Así lo han denunciado este jueves Carlos Boné y Carlos Redón en una comparecencia pública frente a la sede provincial en la plaza San Juan de la capital. Por eso ha exigido el segundo de ellos “más diligencia” porque “ya es hora de que llegue el dinero a nuestros pueblos”, más en un año tan complicado como el actual, en el que “estamos viviendo una pandemia que ha obligado a los ayuntamientos a hacer frente a gastos para hacer de las localidades lugares seguros y también en el que se han sufrido los efectos de los temporales Gloria y Filomena”.
Todo ello, ha complementado Redón, en una provincia como Teruel, con grandes limitaciones presupuestarias como consecuencia del tamaño de los municipios y de las numerosas competencias a las que tienen que hacer frente. “Es momento de poder contar con el dinero para realilzar esas inversiones tan necesarias para mantener en buenas condiciones nuestros pueblos y para garantizar la calidad de vida de los vecinos”, ha explicado.
Muy a su pesar, el portavoz adjunto ha criticado que “lo verdaderamente extraordinario no son los 20 millones de euros aprobados ayer en el Plan de Obras y Servicios”, que son resultantes “de los 10 millones del año pasado y los 10 del presente que aún no hemos recibido”, sino que es que los consistorios turolenses “lleven más de un año sin recibir un euro de la DPT para realizar inversiones”.
Una situación que ha querido unir también a la situación en la que se encuentra el Plan de Empleo y el Plan de Concertación, que todavía no han sido ejecutados. Realidad que constrasta con lo sucedido en otras anualidades porque, según sus palabras, “año a año todos los pueblos contaban con un apoyo incondicional por parte de la institución más importante para los municipios como es la Diputación”. Una actitud que se fundamentaba para Redón en que “contaban con financiación para poder acometer todas esas inversiones”.
Dentro del balance que han realizado los portavoces ‘populares’ de la labor del equipo de gobierno de la DPT, Boné ha lamentado que la propuesta debatida ayer en el pleno, a instancias del PP, para poner en marcha un plan especial para sufragar los costes derivados del paso de la borrasca Filomena por la provincia, fuera rechazada con los votos del Partido Socialista, Partido Aragonés y Ganar.
Un voto negativo que fue justificado por el presidente de la institución, Manuel Rando, en que era el momento de destinar ese dinero en ayudar a los sectores que están más afectados por la crisis sanitaria y económica. Un argumento que “nos parecería bien si fuera del todo cierto”, ha incidido Boné.
“Parece ser que no hay dinero para ayudar a los ayuntamientos a sufragar los gastos ocasionados por la borrasca Filomena pero sí que lo hay para la adquisición, vía renting, de dos vehículos de alta gama por parte del equipo de gobierno y que supone un desembolso de 144.000 euros”, ha lamentado.
Durante la convocatoria de prensa de balance, Boné también ha querido dar respuesta al ruego formulado en el pleno del miércoles por parte del presidente de la DPT, en el que instaba al Grupo Popular a rectificar las afirmaciones realizadas en un artículo de opinión titulado “Hechos, no palabras”. En ese sentido, ha recalcado que “todos los integrantes nos ratificamos en las manifestaciones públicadas en nuestro artículo de prensa porque el señor Rando faltó a la verdad”.
Para justificar ese posicionamiento, el portavoz del PP ha vuelto a explicar, de la misma manera que hizo en la sesión plenaria, que la formación que representa apostó por una reordenación de las competencias de las administraciones para suprimir duplicidades, no para eliminar municipios. Tal es así que, en el año 2015, la formación puso en marcha una campaña bajo el lema “Mi pueblo no se cierra”, en la que Boné y Redón, junto con alcaldes de la provincia y de todo Aragón, mostraban su rechazo a ese hecho en un acto celebrado en la localidad zaragozana de Muel.
Finalmente, Boné ha agregado que si al presidente de la DPT “le preocupa tanto la dignidad y el buen nombre de la institución”, lo que tiene que hacer es “aplicarse en ello porque lo que daña el prestigio de la Diputación son las publicaciones que realizó en redes sociales”. Unas palabras sobre las que el Grupo Popular le pidió explicaciones y ante ello, ha complementado el portavoz “no solo no las dio, sino que se permitió el lujo de darnos lecciones en educación”.