El CEIP La Fuenfresca de Teruel ha recibido esta semana los 36 filtros HEPA que están instalados en las aulas del centro así como en los espacios comunes como el comedor. Los de las aulas de infantil ya están instalados en su ubicación definitiva. En primaria también están funcionando en una ubicación provisional por cuestiones técnicas , que ya se están subsanando.
La propuesta ha contado con el apoyo de prácticamente el 90% de las familias y han sido los padres y madres fundamentalmente los que, de manera voluntaria, han sufragado la compra de los filtros. El coste se ha completado con aportaciones de la Asociación de Madres y Padres del Centro, del colegio, del profesorado y de patrocinadores privados que han respondido al llamamiento hecho por las familias.
Así, han realizado aportaciones empresas y otras entidades: Renault Autersa, Centro de fisioterapia Pilar Canfranc, Atienza, Papeleria Tilos, Club Baloncesto Fuenfresca-Chomón, Giménez y Muñoz, Clínica Reeduca y Tamer. También cabe destacar la aportación de dos entidades más que han preferido mantener el anonimato.
La iniciativa de la compra ha partido desde la Asociación de Padres y Madres (Ampa) del colegio como una medida fundamental pero complementaria a las que se están tomando por indicación de las autoridades sanitarias y educativas. Se sabe que la ventilación de espacios supone hasta un 80% de protección ante un virus de transmisión aérea, como el coronavirus. Hemos aprendido a ventilar nuestras aulas al contar con un filtro HEPA y se sigue un protocolo de ventilación adecuado que combina apertura de ventanas y puertas. Con ello conseguimos disminuir considerablemente la cantidad de partículas en el aire, entre ellas los aerosoles, para evitar la propagación del virus. Esta medida se suma al uso de la mascarilla para los niños mayores de 6 años, así como higiene de manos/superficies y distancias en medida de lo posible.
La elección del filtro se ha realizado teniendo en cuenta que el equipo cumpliera normativa europea, que el filtro fuera homologado y cumpliera la UNE 1822, no tuviera tecnología accesoria de dudosa eficacia ( rayos UV, iones, ..) y que su volumen de filtrado se adecuara a nuestras necesidades.
“Eramos conscientes de que se trataba de una propuesta ambiciosa, pero tratándose de un tema de salud y empujados por la urgencia de los acontecimientos, hemos intentado buscar una solución a nuestro alcance y asequible” explican desde la Junta.
Para ponerlo en marcha, recopilaron toda la información al respecto así como las distintas opciones técnicas, apostando por los mejores filtros y después de este trabajo se informó a los padres para saber si la iniciativa contaba el apoyo suficiente, que debía estar como mínimo en el 90 por ciento de las familias.
“Nos sentimos orgullosos de pertenecer a una comunidad educativa en la que, ante una
situación sanitaria excepcional, se ha demostrado un ejercicio de solidaridad sin precedentes, reaccionando con rapidez a pesar del esfuerzo económico que ello suponía, dado el carácter estrictamente voluntario del pago” explican desde la Junta.
Esta celeridad que requiere la lucha contra el virus es la que ha llevado a los padres a asumir la compra de estos aparatos, tras confirmarse las evidencias cientificas de la transmisión del virus por los aerosoles, porque si algo ha demostrado la lucha contra el virus es que es necesario adelantarse y prevenir. En todo caso, si en un futuro la administración decide la instalación de estos equipos en todos los colegios, se solicitará la reposición de los fondos adelantados.
“Hemos sido pioneros en la implantación de estas medidas que sin duda servirán para que todos nuestros hijos tengan un mayor confort térmico en las aulas los meses venideros, y sobre todo para evitar en la medida de lo posible la propagación del COVID-19”.
