El grupo parlamentario de Ciudadanos en las Cortes de Aragón ha solicitado que se priorice la renovación de trenes de media distancia que circulan en esta comunidad ante las constantes averías que sufren algunas líneas. En este sentido, la formación liberal ha registrado una pregunta en el parlamento, para su respuesta oral en pleno, para conocer si la Consejería de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda tiene constancia de si las nuevas adjudicaciones de trenes de media distancia de Renfe sustituirán el material rodante que circula en esta comunidad y, en caso de que así sea, cuál será la prioridad en la entrega de ese material.
El portavoz del partido liberal en Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, Carlos Ortas, ha recordado que en la primera semana de septiembre se han registrado nuevas averías de trenes en la línea de Teruel a Zaragoza y aunque “Renfe asegura que son averías puntuales, hemos podido conocer por los medios de comunicación que la compañía había decidido incorporar a la línea el modelo TRD 594, que ya circuló por las vías aragonesas y que se debió retirar por sus fallos por sobrecalentamiento”.
La situación en otras líneas como la que une Teruel con Zaragoza y Valencia o la Huesca-Canfranc “también es comprometida por sus constantes averías”, ha apuntado, lamentando que se esté prestando un servicio “de muy mala calidad” y en el que se emplean “los tristemente afamados tamagochis”.
El ministro anunció, a través de su cuenta de Twitter, que el consejo de administración de Renfe adjudicaría 31 trenes de ancho métrico y seis alpinos para la línea FEVE, “pero no para Aragón”, y hay varios contratos más que se deben adjudicar y que se suspendieron durante el estado de alarma.
Entre ellos, un contrato por 2.756 millones de euros que comprende la entrega de 211 unidades para líneas de cercanías, la compra de 105 trenes de media distancia (regionales) y el mantenimiento por un periodo de quince años, valorado en 1.322 millones, y el del suministro de los primeros cercanías híbridos, combinación de la tracción diésel y eléctrica y también de eje variable, para circular de forma indiferente por líneas de ancho ibérico y ancho internacional. En este caso, el pedido es de 38 unidades y el importe de 474 millones.
“Obviamente, la entrega de los trenes mencionados, una vez adjudicados, será escalonada”, ha señalado Ortas, para estimar que, “dada la gravedad de la situación”, sería conveniente que las primeras unidades se entregasen en Aragón, ya que la línea Teruel-Zaragoza, como ejemplo, podría soportar velocidades de 160 kilómetros por hora con las últimas inversiones en la infraestructura realizada, “pero los trenes no pueden circular a más de 120 kilómetros por hora”.